domingo, 9 de mayo de 2010
¿CÓMO PERCIBO MI DOCENCIA?
Siendo que algunos modelos curriculares y programas de estudio experimentan cambios continuos por causas diversas, mi labor empieza por la actualización continua respecto a los modelos educativos, curriculares, planes y programas, contenidos de las asignaturas; lo cual implica la investigación en diversas y numerosas fuentes.
De manera semejante, dado que la índole psicológica y socio – cultural del alumnado manifiesta una continua dinámica, la actualización e investigación se extiende también al conocimiento de la PSICOLOGÍA DEL ADOLESCENTE (e igual a la especulación referente a la dinámica del contexto social y cultural en que se inserta) y a las áreas teórico – metodológicas, pedagógico – didácticas.
En este contexto general, las labores cotidianas se subsumen en la elaboración de programas y cronogramas de asignaturas, selección y aplicación de técnicas y dinámicas para motivar y promover el aprendizaje (formación de los educandos), vigilancia continua respecto a los avances, desviaciones y retenciones de las actividades planeadas, dictaminar las acreditaciones parciales y finales de cada alumno, etc.
Como es bien sabido, en estas actividades se ejerce cierto grado de libertad en la elección de los elementos del proceso de E – A; pero el flujo queda encauzado por los determinantes de la RIEM, que contienen el paradigma de operación.
Este paradigma incluye la valoración del sistema de educación media superior, su pertinencia respecto de los desafíos históricos, sociales y económicos actuales y en prospectiva en nuestro país; el paradigma contiene igualmente las consideraciones doctrinarias (pedagogía, didáctica, roles de alumnos, profesores, evaluación, etc.)
En mi opinión, mi función docente se ve así dividida entre la normatividad del sistema y la conciencia social y cívica; tendiendo siempre a apoyar la formación del alumnado, entendida como la adquisición de funciones, capacidades, competencias para la vida personal y social en el ambiente crítico del nuevo milenio.
De manera semejante, dado que la índole psicológica y socio – cultural del alumnado manifiesta una continua dinámica, la actualización e investigación se extiende también al conocimiento de la PSICOLOGÍA DEL ADOLESCENTE (e igual a la especulación referente a la dinámica del contexto social y cultural en que se inserta) y a las áreas teórico – metodológicas, pedagógico – didácticas.
En este contexto general, las labores cotidianas se subsumen en la elaboración de programas y cronogramas de asignaturas, selección y aplicación de técnicas y dinámicas para motivar y promover el aprendizaje (formación de los educandos), vigilancia continua respecto a los avances, desviaciones y retenciones de las actividades planeadas, dictaminar las acreditaciones parciales y finales de cada alumno, etc.
Como es bien sabido, en estas actividades se ejerce cierto grado de libertad en la elección de los elementos del proceso de E – A; pero el flujo queda encauzado por los determinantes de la RIEM, que contienen el paradigma de operación.
Este paradigma incluye la valoración del sistema de educación media superior, su pertinencia respecto de los desafíos históricos, sociales y económicos actuales y en prospectiva en nuestro país; el paradigma contiene igualmente las consideraciones doctrinarias (pedagogía, didáctica, roles de alumnos, profesores, evaluación, etc.)
En mi opinión, mi función docente se ve así dividida entre la normatividad del sistema y la conciencia social y cívica; tendiendo siempre a apoyar la formación del alumnado, entendida como la adquisición de funciones, capacidades, competencias para la vida personal y social en el ambiente crítico del nuevo milenio.
¿QUÉ SIENTO Y PIENSO DE SER PROFESOR?
Pues pienso que soy un agente que colaboro en la socialización de las nuevas generaciones, en la conservación y renovación de algunas partes muy importantes de nuestra cultura o modo social de vivir.
En esta calidad de agente, ayudo a convertir en realidad los ideales de nuestro sistema educativo, tal como los conciben los grupos dirigentes de tal sistema.
Para mí, ser profesor no es una misión existencial semi-heroica; sino una profesión que se ha de ejercer con profesionalismo (preparación, laboriosidad, seriedad, responsabilidad, efectividad); y que me ha de retribuir con recursos para vivir decorosamente, además, con prestigio y reconocimiento en nuestra sociedad.
Como docente de educación media superior he participado en los proyectos laborales de manera comprometida y con entrega, hasta donde mis capacidades me lo permiten.
Me siento satisfecho por haber realizado un esfuerzo, “le eché ganas”.
Pero me siento insatisfecho porque no todos los alumnos egresaron bien preparados o capacitados, muchos desertaron; además de que no todos los programas (de asignaturas o programas de apoyo a la docencia) se realizaron de manera ideal (algunas veces quedaron incompletos o simplemente no dieron los resultados para los que fueron establecidos)
Solamente espero que al jubilarme o retirarme del servicio, no se diga “treinta años de servicio, treinta generaciones de alumnos echados a perder”
En esta calidad de agente, ayudo a convertir en realidad los ideales de nuestro sistema educativo, tal como los conciben los grupos dirigentes de tal sistema.
Para mí, ser profesor no es una misión existencial semi-heroica; sino una profesión que se ha de ejercer con profesionalismo (preparación, laboriosidad, seriedad, responsabilidad, efectividad); y que me ha de retribuir con recursos para vivir decorosamente, además, con prestigio y reconocimiento en nuestra sociedad.
Como docente de educación media superior he participado en los proyectos laborales de manera comprometida y con entrega, hasta donde mis capacidades me lo permiten.
Me siento satisfecho por haber realizado un esfuerzo, “le eché ganas”.
Pero me siento insatisfecho porque no todos los alumnos egresaron bien preparados o capacitados, muchos desertaron; además de que no todos los programas (de asignaturas o programas de apoyo a la docencia) se realizaron de manera ideal (algunas veces quedaron incompletos o simplemente no dieron los resultados para los que fueron establecidos)
Solamente espero que al jubilarme o retirarme del servicio, no se diga “treinta años de servicio, treinta generaciones de alumnos echados a perder”
LOS SABERES DE MIS ESTUDIANTES.
1) Lo que nuestros estudiantes saben hacer en Internet.
A. Como reservorio, es decir para obtener: información, música, fotos, video.
Los alumnos utilizan una elevada cantidad de programas de Internet para obtener toda clase de información.
Los materiales que les interesan son toda clase de temas (apuntes, temas escolares, cursos de informática, libros, bibliotecas virtuales, cursos en línea, documentales, etc.), material multimedia (fotos, música, videos, video juegos y otros), material de informática (programas, instructivos, tutoriales, actualizaciones).
Los programas que utilizan son:
a. fuentes de materiales ya elaborados como wikipedia, monografías, Rincón del vago, aulaclic, ares, bibliotecas virtuales,etc.
b. Buscadores genéricos como google, yahoo, etc.
c. Foros y comunidades de usuarios, tales como Ba-k, taringa, youtube, limewire,
d. Descarga de multimedia, tales como Itunes, elcorillard, youtube, atubecatcher, etc.
B. Como espacio social de acción individual y colectiva, es decir, como espacio de comunicación y de trabajo para: crear, producir, compartir, intercambiar, distribuir, colaborar, obtener asistencia técnica y profesional, comprar, vender.
Para interactuar y compartir toda clase de información acuden a una elevada cantidad de programas, tales como los siguientes:
Facebook, Ba-k, Hi5, Twitter, My space, Messenger, Quepasa, Metroflog, Fotolog, Mercado libre, Mimorelia.com, Netlog, Ebuffy, foros públicos o privados, Chat, flogg, correo electrónico, etc.
2) ¿Qué podemos hacer para aprovechar esos saberes en el aula?
Es común o tendencia dominante que los utilicen como medio de entretenimiento.
Si deseamos darles aplicación educativa (no solo en el aula) creo que se requieren varias acciones, entre las cuales se me ocurren las siguientes:
a. difundir su uso y capacitar tanto a maestros como alumnos,
b. aplicar la pedagogía y psicología educativa para que las experiencias en el uso de esos recursos sean vivencias significativas,
c. instrumentar el uso institucional del internet (que haya conexión a internet, sala de informática, estructurar los programas educativos en función del uso de Internet, etc.),
d. orientar las actitudes para que la Internet se perciba como recurso de trabajo y no únicamente como pasatiempo,
e. ampliar y seleccionar los instrumentos (programas de Internet) para que sean adecuados a la educación (agregando programas como Hot potatoes, Dokeos, Moodle, Web ct, programas para elaborar mapas conceptuales, Director, Flash, Switc, etc.).
3) ¿Quién van a enseñar a quién y qué le enseñará? y ¿dónde lo harán?
Creo que es necesario impulsar comunidades de estudio y aprendizaje en las que participen los docentes, alumnos, padres de familia, autoridades educativas, público en general, etc. Por supuesto que es necesario contar con servicios técnicos (en pedagogía, psicología educativa, informática) que asesoren a los usuarios
A. Como reservorio, es decir para obtener: información, música, fotos, video.
Los alumnos utilizan una elevada cantidad de programas de Internet para obtener toda clase de información.
Los materiales que les interesan son toda clase de temas (apuntes, temas escolares, cursos de informática, libros, bibliotecas virtuales, cursos en línea, documentales, etc.), material multimedia (fotos, música, videos, video juegos y otros), material de informática (programas, instructivos, tutoriales, actualizaciones).
Los programas que utilizan son:
a. fuentes de materiales ya elaborados como wikipedia, monografías, Rincón del vago, aulaclic, ares, bibliotecas virtuales,etc.
b. Buscadores genéricos como google, yahoo, etc.
c. Foros y comunidades de usuarios, tales como Ba-k, taringa, youtube, limewire,
d. Descarga de multimedia, tales como Itunes, elcorillard, youtube, atubecatcher, etc.
B. Como espacio social de acción individual y colectiva, es decir, como espacio de comunicación y de trabajo para: crear, producir, compartir, intercambiar, distribuir, colaborar, obtener asistencia técnica y profesional, comprar, vender.
Para interactuar y compartir toda clase de información acuden a una elevada cantidad de programas, tales como los siguientes:
Facebook, Ba-k, Hi5, Twitter, My space, Messenger, Quepasa, Metroflog, Fotolog, Mercado libre, Mimorelia.com, Netlog, Ebuffy, foros públicos o privados, Chat, flogg, correo electrónico, etc.
2) ¿Qué podemos hacer para aprovechar esos saberes en el aula?
Es común o tendencia dominante que los utilicen como medio de entretenimiento.
Si deseamos darles aplicación educativa (no solo en el aula) creo que se requieren varias acciones, entre las cuales se me ocurren las siguientes:
a. difundir su uso y capacitar tanto a maestros como alumnos,
b. aplicar la pedagogía y psicología educativa para que las experiencias en el uso de esos recursos sean vivencias significativas,
c. instrumentar el uso institucional del internet (que haya conexión a internet, sala de informática, estructurar los programas educativos en función del uso de Internet, etc.),
d. orientar las actitudes para que la Internet se perciba como recurso de trabajo y no únicamente como pasatiempo,
e. ampliar y seleccionar los instrumentos (programas de Internet) para que sean adecuados a la educación (agregando programas como Hot potatoes, Dokeos, Moodle, Web ct, programas para elaborar mapas conceptuales, Director, Flash, Switc, etc.).
3) ¿Quién van a enseñar a quién y qué le enseñará? y ¿dónde lo harán?
Creo que es necesario impulsar comunidades de estudio y aprendizaje en las que participen los docentes, alumnos, padres de familia, autoridades educativas, público en general, etc. Por supuesto que es necesario contar con servicios técnicos (en pedagogía, psicología educativa, informática) que asesoren a los usuarios
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